El día de ayer, 12 de octubre, ha partido a las moradas celestiales nuestro querido pastor Carmelo Álvarez. Al conocer esta triste noticia, vino a nuestra mente la palabra del Señor cuando dijo: “yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá; y todo aquel que vive y cree en mí, no morirá eternamente”.
El profesor Carmelo Álvarez, conocido y reconocido profesor de teología, líder y asiduo acompañante del trabajo teológico en nuestro continente y en otras regiones, se caracterizaba, entre otros atributos, por su alegría, disposición al diálogo y capacidad para alcanzar acuerdos, autor de libros y otros muchos escritos, predicador, historiador, formador, un amigo-maestro.
Colaboró con muchas instituciones de educación teológica y ecuménicas en nuestros países. A la Comunidad Teológica la visitó desde los años ochenta cuando fue profesor visitante, luego, en varias ocasiones, regresó para reuniones, encuentros y la última década, en más de una oportunidad, asesoró la Semana Teológica y predicó en el culto aniversario.
También colaboró con el Seminario Bíblico Latinoamericano, actual Universidad Bíblica Latinoamericana/UBL, con el Departamento Ecuménico de Investigaciones/DEI, siendo su coordinador. Profesor también, del Seminario Teológico Cristiano de la Iglesia Discípulos de Cristo, del Seminario Evangélico de Puerto Rico, del Seminario de la Unión Evangélica Pentecostal Venezolana, donde también fue nombrado obispo.
Ferviente motivador y participante de CEPLA, colaborador incansable con el Consejo Latinoamericano de Iglesias/CLAI y de tantas otras iniciativas que le conocieron y compartieron parte de su vida, compromiso y testimonio.
Sin duda una vida dedicada a la causa del Evangelio, a la docencia, en la búsqueda de construir puentes y tejer redes en nuestra realidad, diversa y compleja.
Desde la Comunidad Teológica Evangélica, casa con la cual mantuvo lazos de cooperación, apoyo, amistad y diálogo constante, manifestamos nuestras palabras de tristeza por su partida, abrazamos a su familia e iglesia y, al igual que el profesor Carmelo, seguimos creyendo y esperando por la manifestación plena del Hijo de Dios, en su gloria y majestad.

Descansa en la paz de los santos!

Prof. Daniel Godoy
Rector CTE/FELAT